Durante el verano siempre llegan los madrugones de nuestros chicos aunque no sea época de colegio. Nosotros para paliar dichos madrugones sacamos todos nuestros juegos, en esta ocasión para mi hijo Lorenzo sacó los propios de su edad. Los que más le gustan son los siguientes: ¡VAMOS, VAMOS, PINGÜINITO! Es un juego muy simple que les encanta a los más pequeños, la premisa es conseguir avanzar a nuesta mamá e hijo pingüino hasta los pescados. Para poderlo hacer tenemos que tirar el dado, si salen huellas grandes la mamá y su hijo irán cruzando su camino, si salen huellas pequeñitas el bebé pingüino se escapará y avanzará solo. Gana el jugador que alcance los pescados con su mamá e hijo pingüino. EL FRUTALITO El frutalito es un juego de memoria muy simple y divertido a la vez, la suerte y la memoria entran en juego para no despertar al cuervo y poder recolectar las cerezas en nuestra cesta. Debajo de cada ficha de flores podemos encontrar animales durmiendo, cerezas o el cuervo, segú...
Blog educativo para dar a conocer como un maestro ilusionado trabaja en la escuela