La semana pasada comenzamos a estudiar todo lo relacionado con el agua y sus propiedades. Por lo que, en estas últimas sesiones teníamos que estudiar como era el proceso del ciclo del agua.
El año pasado ya vieron con su profesora cómo funcionaba, así que para comenzar y desarrollar un par de sesiones nos olvidamos del libro de texto e intentamos crear nuestro propio ciclo de agua.
Por ello, el primer paso fue hablar entre todos sobre qué elementos influyen y qué fases se producen, consiguiendo formar este esquema, tras la lluvia de ideas conjunta.
Tras explicar todo, les presente una bolsa de congelados y les pregunte que me comentarán cómo podríamos utilizar esa bolsa para representar el ciclo del agua, para ya después, comenzar a crearlo.
Cada uno de nuestros equipos recibían una bolsa y un rotulador permanente; y una a uno iban dibujando y escribiendo las distintas fases del ciclo del agua, de forma que todos terminaron teniendo la suya.
Como teníamos diferentes colores de rotulador, los fuimos rotando para compartirlos.
Ellos disfrutaron un montón dibujando, aunque lo que más les motivo fue el momento de introducir agua y echar el colorante azul.
El resultado final fue colgado en nuestras ventanas para esperar que el fantástico Sol de la tarde calentará nuestra agua.
La verdad que en la tarde lució bastante el Sol y conseguimos ver como se creaba vapor, el cual, se convertía después en pequeñas gotas que se escurrían de arriba a abajo.
Fue una experiencia gratificante para los alumnos, porque ellos mismos montaron sus propias bolsas y observaron, en una mayor o menor medida, los procesos de evaporación y condensación.
La verdad que ellos disfrutaron y fue un par de sesiones diferentes que encantaron a todos los niños.
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