Jugando con nuestros sentidos

Retomo una idea que hace dos años hice con mis alumnos en Natural Science, que es el taller de los sentidos.

Para ésta vez, preparé un material para experimentar el sentido con el órgano que se necesitaba y por estaciones de grupo en grupo van pasando para "jugar con nuestros sentidos".

Tras pasar por todos ellos en una tabla anotamos todos los resultados de manera consensuada como grupo clase.

Para el tacto teníamos una caja donde introduje tiras de periódicos. Ellos tenían que meter la mano por la caja y sentir con su palma que objeto era. 

La verdad que todos los grupos lo adivinaron.

Para el gusto les traje una bandeja con tres recipientes dónde podrían encontrar un sabor dulzón (azúcar), un sabor más fuerte (ajo molido) y un sabor más amargo (granos de café). 

La verdad que fue en la estación dónde más se divirtieron porque aprovechaban el contraste  de sabores y alucinaban tras probar el azúcar y luego el café o el ajo.

Ver su caras fue muy divertido.

Para la vista, les traje el juego del Lince con Peppa Pig y les retaba a encontrar los objetos lo antes posible.

Para ejercitar su agudeza auditiva, les introduje varias piedras dentro de dos cajas. La mayoría de los chicos lo adivinaron.

Y finalmente usamos nuestro olfato para oler azúcar de vainilla y cebolla molida.
Esta estación que parecía la más complicada fue acertada a la primera por el primer grupo, lo cual me sorprendió gratamente.


Tras pasar por todas las estaciones compartimos entre todos la información y rellenamos la ficha.

Fue una sesión divertidísima, dónde mi alumnado disfrutó y aprendió a la vez, y aunque en algunas ocasiones alzábamos la voz o creábamos un ambiente de desorden, éste tipo de talleres me encantan porque hacen prevalecer qué ellos aprendan y se diviertan a mantener un silencio escribiendo ejercicios repetitivos.